¡Para! No busque más. Este se convertirá en tu aperitivo favorito para fiestas y Nochevieja. Es fácil de preparar, aunque parezca que has pasado horas en la cocina. La deliciosa combinación de remolacha ligeramente dulce, ricotta cremosa y queso azul picante ya es increíble, pero emparejado con crema balsámica y aceite de menta, ¡estos bocados fáciles son absolutamente irresistibles!
Preparación
- Cortar las remolachas en rodajas finas, idealmente con una cortadora de mandolina (¡cuidado con los dedos!). Poner las rodajas en agua con sal un momento después de cortarlas.
- En un bol, mezcla el queso azul con la ricotta y sazona con pimienta. Si lo deseas, transfiere la mezcla de ricotta a una manga pastelera con una boquilla grande para facilitar su aplicación.
- Mezcla la menta, el aceite de oliva y una pizca de sal y pimienta con una batidora de inmersión para hacer el aceite de menta.
- Coloca las rodajas de remolacha en platos o en una fuente grande. Extiende la mezcla de queso ricotta azul sobre las rodajas de remolacha.
- Rocía con el aceite de menta y la crema balsámica. Sirve inmediatamente.