En Semana Santa, sobretodo en jueves y viernes santo, en mi tierra no comemos carne. Es una tradición religiosa muy antigua, pero que poco a poco ha pasado a ser algo cultural o familiar. En estos días se hacen postres muy típicos y potajes y otros platos en los que el bacalao es el protagonista.
Para esta ocasión yo os sugiero una ensalada de garbanzos con bacalao con cebolla, huevo cocido, bacalao y un toque de pimentón. Es una ensalada muy fresquita, y muy muy rica.
Yo uso garbanzos de bote ya cocidos, que me ahorran mucho tiempo y dan muy buen resultado. Y el resto de la ensalada podéis "tunearla" a vuestro antojo. Por ejemplo, también le iría muy bien unas espinacas, tanto frescas con salteadas.
¡Que disfrutéis de la receta!
Preparación
1. Si compramos el bacalao salado, tenemos que desalarlo introduciéndolo en un cuenco de agua fría y dejándolo en la nevera durante 2 días. Tenemos que cambiarle el agua cada 12 horas.
2. Cocemos los huevos en agua hirviendo con vinagre durante 10-12 minutos. Los pelamos, cortamos uno en trocitos, y el otro en cuartos.
3. Podemos cocinar un lomo bien al microondas en un recipiente con tapa (o tapado con papel film) durante 4 minutos con la piel hacia arriba, o en la sartén a fuego medio con aceite de oliva unos cuatro o cinco minutos por cada lado (depende del grosor del lomo), primero por el lado que no tiene piel.
4. Cuando el bacalao se enfríe, le quitamos la piel y lo desmigamos con un tenedor.
5. Cortaremos la cebolla en trozos pequeños.
6. Poemos usar garbanzos de bote ya cociodos, que nos darán el mismo resultado y nos ahorramos el largo tiempo de cocción.
7. Mezclaremos todos los ingredientes en un bol, garbanzos, huevo, cebolla y bacalao y aliñaremos con aceite de oliva, vinagre, sal y un poco de pimentón dulce.
Recomendaciones del autor
Podemos agregarle espinacas frescas para darle un toque verde y fresco.