Probar nuevas técnicas como nuevas combinaciones para comer las verduras de temporada es una de mis mayores distracciones en la cocina. Leo, imagino, versiono, pruebo y luego creamos platos deliciosos como el de hoy.
Así de fácil. Una mezcla que jamás hubiera probado, pero que te sorprende por lo ligero y refrescante.
Están deliciosas, son un poco engorrosas de limpiar, pero con una buena música de fondo se hace en un periquete y hasta te dan ganas de bailar.
Preparación
- Precalentamos el horno a 180 grados.
- Mientras tanto, vamos limpiando las alcachofas, las cortamos en cuartos dejándole los tallos y los vamos dejando en remojo en un cuenco con agua, perejil y limón. Así evitaremos que no se oxiden y se pongan feas.
- Ponemos el agua a cocer en una olla agua con unas rodajas de limón y un poco de sal marina.
- Tan pronto rompa a hervir, las introducimos y las dejamos 2 minutos.
- Colocamos en la bandeja del horno los limones en rodajas.
- Pasados esos 2 minutos, las vamos sacando y colocamos sobre la bandeja que tenemos preparada.
- Las bañamos bien con el zumo de las 2 naranjas y colocamos el tomillo de manera generosa.
- Tapamos la fuente y al horno 20 minutos durante 180 grados. Pasado ese tiempo lo ponemos unos 5 minutos más a 200 grados ya destapado.
- Las emplatamos en la fuente donde vayamos a servirlas, rociamos con unos hilos de aceite de oliva virgen extra y listo para disfrutar.
Increíblemente sencilla y os va a encantar.