Hoy la crema que os traigo es de brócoli morado y espinacas. Realmente el brócoli morado al cocinarlo se queda verde oscuro, pero como tenía unas coliflores moradas que si conservan su color, las he utilizado como topping y poder así disfrutar de este colorido tan espectacular.
¿No os parece que es preciosa? Pues además es un chute de vitaminas para tu cuerpo.
Preparación
- Lavamos bien la verdura.
- Picamos la cebolla en trozos grandes 1-2 cms y rallamos el jengibre.
- En una olla con un chorreón de aceite ponemos el jengibre primero y movemos bien.
- A continuación la cebolla que dejaremos sofreír a fuego medio hasta que comience a coger color.
- Mientras se va haciendo, cortamos el brócoli en arbolitos y los añadiremos cuando la cebolla esté lista. Salpimentamos.
- Rehogamos todo junto durante unos 3 minutos y añadimos agua o caldo de verduras hasta cubrirlo más escasamente.
- Dejamos que se haga durante unos 10 minutos o hasta que veáis que ya está blandito el brócoli.
- Una vez esté lista y ya con el fuego apagado, incorporamos un buen manojo de espinacas frescas y una cucharadita de pasta miso.
- Acto seguido batimos con la batidora hasta conseguir la textura deseada.
- A la hora de servir, decoraremos con los toppings que mejor nos venga. En esta ocasión he usado un poco de coliflor morada salteada que tenía, un poco de perejil y unas semillas de sésamo. ¡Un espectáculo!