¿Eres un apasionado de la endivia? La endivia tiene ese sutil borde amargo y una textura firme y crujiente. Tanto la endivia cruda como cocinada es un éxito con todo el mundo porque mantiene siempre su forma. Debido al sabor amargo va como anillo al dedo con sabores dulces para crear ese equilibrio perfecto de amargor y dulzor. En esta receta cocinas la endivia en zumo de pera y vinagre balsámico, de hecho, la caramelizas para revelar esa irresistible combinación de amargor y dulzor, y terminas el plato con queso de cabra tierno y cremoso y nueces asadas. ¡Un plato que sabe a gloria y es festivo!
Preparación
- Corta por la mitad la endivia longitudinalmente y corta a su vez las mitades gruesas en cuartos más pequeños.
- Derrite una gran porción de mantequilla en una sartén o wok grande. Revuelve la endivia y fríela durante 6 minutos hasta que se dore. Vierte el zumo de pera en la sartén. Añade el romero y cambia el fuego a fuerte.
- Deja el zumo de pera que hierva a fuego fuerte. Cuando el zumo esté casi hecho, añade el vinagre balsámico. Déjalo hervir a menos fuego. Sazona la endivia con pimienta y sal.
- Asa las nueces en una sartén seca.
- Sirve la endivia con las nueces asadas y desmigaja por encima un poco de queso de cabra según tu preferencia y gusto.
Recomendaciones del autor
Si no tienes vinagre balsámico caramelizado, solo añade 1 cucharada de vinagre balsámico de siempre y 1 cucharada de azúcar moreno.