Esta receta la puedes encontrar en casi cualquier rincón del Sur de España y refleja la base y la sencillez de la cocina de siempre: Patatas, cebolla y un buen aceite.
En concreto en Cádiz, donde vivimos, no hay ni un bar de tapas donde no encuentres nuestras "papas aliñás" y en Sanlúcar donde se cultiva mucha papa, os lo podéis imaginar.
Este tipo de platos de toda la vida, que son tan sencillos y tan auténticos, me apasionan. No conozco bien la historia pero casi me la puedo inventar. Estoy segura de que nació fruto del hambre y de la combinación de productos básicos, sencillos y auténticos, vamos de lo que nos da el huerto , lo que nos regala el campo, porque aunque cultivemos la tierra, siempre la cosecha es un regalo.
Que los productos sean sencillos no significa que sea fácil encontrarlos. Una buena selección de ingredientes es fundamental. En Sanlúcar se cultiva mucho la patata Spunta que es perfecta para esto. Arenosa y tierna, es ideal para este tipo de ensalada.
Con una buena papa, cebolla nueva y aceite de oliva virgen extra de calidad tenéis un plato redondo. Hoy he querido prepararlo con una ventresca de atún por aquello de que fuera un plato más completo, pero no hace ni falta. Cuando esta ensalada de patatas está buena, no necesita nada más.
Preparación
- Lavar bien la piel de las patatas. Aunque luego las pelemos, me gusta que estén bien lavaditas cuando las pongo a hervir.
- Colocarlas en una olla, cubrirlas de agua y ponerlas a fuego fuerte. Cuando rompan a hervir, dejarlas unos 15 minutos aproximadamente.
- Podéis ir picando la cebolla en juliana mientras se templa la patata.
- Las pelamos y las cortamos en trozos medianos o a rodajitas cuando aún están calentitas.
- Añadimos un chorreón de aceite y movemos bien para que se mezcle bien la patata con el aceite.
- Preparamos el aliño y lo incorporamos junto a la cebolla. Moviéndolos bien.
- Por último colocamos la ventresca, espolvoreamos con perejil picado y tenemos una ensalada de patatas deliciosa y muy veraniega.
Recomendaciones del autor
El tiempo de cocción de la patata siempre va a depender del tamaño . Lo mejor que la pinchéis para ver si están hechas por dentro.
No os olvidéis de añadir aceite cuiando la patata está aún caliente, así evitaréis que se os seque o endurezca.