Ingredientes

  • 2 tazas de calabacín rallado
  • 1 taza de espinacas baby
  • 4 cucharadas de piñones tostados
  • 1/2 taza de parmesano rallado
  • 1 taza y 1/2 de albahaca fresca
  • 2 dientes de ajo, pelados y machacados
  • 1 cucharadita de sal
  • 1/2 cucharadita de pimienta negra
  • 3 cucharadas de aceite de oliva virgen extra

El calabacín es una prolífica verdura de finales de verano.

Los días de verano llegan a ser más cortos y los cajones de las verduras más pequeños; rebosando con la cosecha de amigos que los han llenado.
El pesto es una gran forma de utilizar dos calabacines - mezclándolo en un versátil condimento. Necesitarás una licuadora o robot de cocina para obtener la textura adecuada.

¡Esta receta podría sorprenderte! Tiene el sabor del auténtico pesto de albahaca y los consumidores exigentes ni siquiera sabrán que está envasado con extra de verduras. Las espinacas añaden tanto extra nutrientes como verduras coloridas para contrarrestar la carne pálida del calabacín. 

Total votes: 255

Preparación

  1. Ralla el calabacín utilizando un rallador de caja o robot de cocina.
  2. Quita tanta agua del calabacín como puedas.
    Yo envuelvo el mío en un paño de cocina limpio y lo aprieto encima del fregadero.
  3. Seca los piñones tostados en una sartén a fuego medio. ¡Vigílalos con cuidado! Mueve la sartén conforme se calienta y quítalos del calor tan pronto como estén aromáticos y ligeramente tostados; solo llevará 2 o 3 minutos.
  4. En tu fuente para mezclar, añade el calabacín y todos los otros ingredientes, excepto el aceite de oliva. Utilizando un robot de cocina o licuadora, mézclalos hasta formar una pasta espesa.
  5. Una vez que todos los ingredientes estén mezclados, añade el aceite de oliva – un chorrito pequeño poco a poco hasta que tengas la textura correcta. Podrías no necesitar todo el aceite.

Recomendaciones del autor

Las cantidades de ingredientes son flexibles- ajústalas a tu gusto. ¡Sigue a tu instinto cuando añadas albahaca, queso, y ajo!

Almacenar:

Si no lo vas a consumir de inmediato, echa tu pesto con una cuchara en un tarro, y corónalo con una capa fina de aceite de oliva antes de sellarlo. Esto reducirá la oxidación. Tu pesto se mantendrá en el frigorífico durante una semana.

Servir:

Para una comida súper rápida, yo disfruto la mía mezclando la pasta con algunos tomates cherry asados. ¡Es tan versátil! Puedes:

  • añadirlos a las patatas cocidas como acompañamiento
  • utilizarlos como un sabroso aliño de ensalada
  • mezclarlos con ñoquis
  • untarlos en un sándwich
  • untarlos en una base de pizza
  • servirlos como una salsa con galletitas saladas o crudités  
  • poner una cucharada al pollo o a la calabaza asada
  • Echarla por encima de un huevo frito

¿Quieres estar al día de nuestras novedades? ¡Suscríbete a nuestro boletín!