Esta deliciosa receta de puré de chirivía es sencillísima y muy original. Te sorpenderá por su toque ligeramente dulce, sus matices terrosos y el picantito del jengibre. Una explosión de sabores absolutamente deliciosa. Un plato fácil y reconfortante que repetirás.
Preparación
- Pelamos y lavamos la patata y las chirivías. Las troceamos y reservamos.
- En una olla, calentamos un poco de aceite de oliva a fuego medio. Añadimos el jengibre rallado. Sofreímos hasta que comience a coger color.
- Incorporamos los trozos de chirivía y patata. Los rehogamos unos minutos, removiendo de vez en cuando y añadimos el caldo hasta casi cubrirlo con una pizca de sal, pimienta y nuez moscada.
- Tritura bien la mezcla con ayuda de una procesadora.
- Si prefieres que el puré sea más suave, pásalo por un tamiz para quitar parte de la fibra y sea más agradable.
- Sírvelo calentito con el topping que prefieras. En este caso una láminas de chirivía fritas, unos piñones, pizca de tomillo y su aceite crudo de oliva.
Recomendaciones del autor
Como guarnición o como base de otra elaboración o simplemente a cucharadas como me lo he comido yo.