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Cómo Planificar Tu Camino Hacia La Más Sencilla Cena Familiar de Navidad

Todo lo que quieres para Navidad es... ¡¡terminar!! ¿verdad?

Lo entiendo. Ser el anfitrión de la cena de Navidad en familia es estresante. Toda la planificación implicada; pensar lo que cocinar, comidas para todo los distintos tipos y gustos, disponer las decoraciones de la mesa y sitios en la mesa (¿dónde se van a sentar todos?) y demás. Por no hablar de toda la compra en supermercados abarrotados con villancicos repitiéndose incansablemente. Y ¿cómo se supone que vas a pagar por todo?

Solo pensar en la inminente temporada de vacaciones instantáneamente te agota.

Totalmente siento tu dolor. Mi familia es enorme; además de mi madre, hay hermanos y hermanas (sí, ambos en plural) y parejas y sobrinas y un sobrino. Por parte de mi marido, hay más hermanos con parejas y sobrinas y la familia política. Créeme, ¡es mucha gente para recibir!

Pero me encanta una gran reunión feliz de Navidad; el olor de la canela, clavos y pan de jengibre, todas las caras felices alrededor de las mesas improvisadas, la charla fuerte despreocupada y las carcajadas y por supuesto la deliciosa comida. Creación de recuerdos a toda velocidad. 

Por tanto, vamos a mirar cómo hacer que todo suceda, sin volverse loco y sin que cueste un ojo de la cara.

Una Estrategia Infalible que Todo Anfitrión de la Cena Debe Saber

La clave para una cena familiar de Navidad asequible y sin estrés es en realidad bastante sencilla: Planificar.

Podría parecer demasiado bueno para ser verdad, pero comenzar tu fiesta planificando con un mes de antelación es cambiar las tornas. Prepararte por anticipado te permite dividir y ganar: reparte todas las tareas en trozos del tamaño de un bocado que puedas abordar una a una o delegar.

Así que cuando llegue la semana de Navidad, tu frigorífico y despensa tendrán existencias, habrás hecho algunos platos por anticipado y habrás incorporado pequeños ayudantes de Papá Noel. Lo más importante, te sientes preparada, relajada y con el control.

Esto es cómo haces que la fiesta de este año sea la más fácil hasta ahora.

Planifica con Anticipación Para Salir Adelante

1. La Cocina  

Cocinar para un gran grupo de personas puede ser bastante estresante, así que vamos a ser inteligentes sobre el menú:

• Elige platos que tengan aspecto de impresionantes y sean increíblemente sencillos de hacer (mi truco de cocina favorito). Me encanta este plato de coliflor, tan festivo.
• Elige platos que puedas preparar por adelantado y conservarlos hasta el gran día. Esto funciona especialmente bien para entrantes, acompañamientos y postres. La sopa es una estupenda opción para un entrante hecho por anticipado, prueba alguna de estas recetas:

       - Sopa de coliflor-nabo con crumble de beicon y avellanas
- Sopa de boniato y pimiento asado con albahaca
- Sopa picante de zanahoria y jengibre

• Elige recetas económicas, comidas que utilicen ingredientes económicos y que incluyan carbohidratos que te hagan sentir llena más rápido, permitiéndote servir porciones más pequeñas.
• Elige verduras económicas como la berenjena, el puerro, el calabacín y la coliflor.
• Crea un menú de Navidad para toda la familia por igual, adultos y niños.

Reúne a la familia alrededor de la mesa y comparte ideas del menú teniendo en cuenta lo anterior. Haz esto 3-4 semanas antes de dejarte bastante dinero en el nro. 2 (la compra) y en el nro. 3 (compartiendo la carga).

2. La Compra

Aunque comprar comida pueda resultar agotador cualquier día, la temporada de vacaciones lo lleva a un nivel diferente. Por tanto, vamos a salir adelante del pánico estacional con estas inteligentes tácticas:

• Planifica tu menú de Navidad con un mes de adelanto, luego escribe tu lista de la compra como corresponde. Esto te ayuda a sacar provecho de ofertas, preferible al pánico de las compras caras en el último minuto.
• Comprueba tu despensa de salsas y condimentos y reponlos donde sea necesario.
• Comienza comprando artículos no perecederos. Abastécete de comidas en lata, en cajas y congeladas. No olvides el café, té y chocolates.
• Encarga tu pavo y jamón. Si encargas carnes congeladas, asegúrate que tienes espacio disponible en tu congelador.
• Las bebidas de Navidad pueden fácilmente volar tu presupuesto cuando las compras a la vez; añade un par de botellas a tu compra semanal (¡solo ofertas!), así cuando llegue el gran día tendrás todas compradas.

Mira 10 técnicas de compra inteligente para más modos de mantener bajos tus costos de alimentos.

3. Compartiendo la carga

Ser el anfitrión de la cena de Navidad NO significa que seas la única persona responsable de su éxito.

Por el contrario, compartiendo la carga (tanto física como financieramente) contribuirá positivamente al sentido de todos de mérito y pertenencia. Trabajar como un equipo es genial para el vínculo familiar, así que no dudes en pedir ayuda.

Aquí hay un par de mis modos favoritos de meter a todo el mundo en el espíritu de la Navidad:

• Proporciona a cada pareja un plato que preparar. Y aquellos que no sean demasiado aficionados a la cocina, pueden organizar los maridajes. ¡Nosotros también tenemos sed!
• Transforma a los niños en pequeños ayudantes de Papá Noel. Hazles responsables de la elaboración de las decoraciones de la mesa, incluido el menú y las servilletas. Mi hija hace poco se dedicó a doblar mariposas para todos nuestros invitados a la cena. Decidiendo quién se sienta dónde, hacer tarjetas con los nombres y poner la mesa son otras tareas para delegar a los elfos.
• En el día, asígnale una tarea a un miembro de la familia de servir las bebidas, de modo que puedas enfocarte en la comida.

Una Nota Muy Importante Sobre La Limpieza

Si hay una cosa que he aprendido de todas las cenas de las que he sido anfitrión a lo largo de los años, es esto: SOLO utiliza cubertería, vajilla y vasos que se puedan meter en el lavavajillas.

Seguro, cuchillos de carne de lujo, la porcelana de tu abuela y platos de madera para servir todo parece fantástico y hacen que tu mesa brille, pero es sencillamente que no vale la pena molestarse. Guárdalos para esas cenas íntimas.

Y otra cosa: asegúrate de que tu lavavajillas esté vacío cuando los invitados lleguen. La mayoría de los invitados se ofrecerán a limpiar la mesa, muchos también pondrán los platos directamente en el lavavajillas si hay espacio. De modo que, para apreciar esta ayuda, asegúrate de que esté vacío. Y haciéndolo funcionar cada vez que esté lleno, los invitados serviciales lo vaciarán sin que ni siquiera te des cuenta.

No te preocupes si no tienes un lavavajillas, solo asegúrate que tienes bastante detergente líquido y paños para secar disponibles. Fregar los platos tras las reuniones familiares se convirtió en una tradición en la casa de mis padres. 

¡Sueño con una… Cena de Navidad en Familia!