Cooking
La versatilidad de las espinacas en la cocina
Reconozco que me encantan las espinacas. Me encantan porque es un alimento muy nutritivo, saludable y súper versatil en la cocina. Además están buenísimas. ¿Qué más se le puede pedir a una hoja? Además, para mi que soy intolerante a la lactosa, la espinaca es fundamental en mi dieta, ya que es rica en calcio y me aporta este mineral que dejo de tomar con los lácteos. Además de apenas contener calorías y ser muy rica en agua, es una gran fuente de proteínas, vitaminas, ácido fólico y es una gran fuente de antioxidantes como ya os contaba en este artículo sobre las propiedades de las espinacas y el falso mito de popeye.
Pero en este artículo no os voy a hablar de sus propiedades nutricionales si no de la versatilidad de las espinacas en la cocina y es que como veréis, podemos comerlas de muy distintas formas, todas ellas deliciosas.
Espinacas crudas
En aperitivos y ensaladas
La hoja de la espinaca así tal cual, en crudo, está muy buena y mejora cualquier sandwich o bocadillo. Prueba a sustituir la lechuga por unas cuantas hojas de espinacas frescas en tu sandwich de pavo, con unas rodajas de tomate, un huevo cocido, atún y un buen aceite de oliva virgen extra y verás qué rico.
¿Has probado alguna vez a añadir a tu ensalada hojas de espinacas frescas, junto a otras hojas como lechuga, rúcula o canónigos? le da un toque crujiente y súper rico. Como en esta ensalada de espinacas, cherry, picatostes, anchoas y vinagreta de pistachos.
En batidos o smoothies
Las espinacas son muy depurativas, y ahora están de moda los batidos y smoothies detox (desintoxicantes) para eliminar radicales libres de nuestro organismo. Podemos hacernos un súper batido detox con un puñado de espinacas, 2 kiwis, manzana, un poco de apio, pepino, jengibre rallado y un poco de agua o bebida vegetal de avena o arroz. Todo trituradito, y ale, un súper batido reconstituyente y depurativo por la mañana.
Espinacas cocinadas
En tortilla
Una de las formas en las que más me gusta comer las espinacas en en tortilla. Yo suelo hacer mucho esta tortilla de espinacas súper jugosa con un poco de atún y queso. De heco me gusta comerla fría al día siguiente. Y mi consejo es que no cozáis las espinacas en agua, puesto que pierden muchas propiedades. Lo mejor es saltearlas en una sartén con un poco de aceite de oliva hasta que consuma prácticamente todo el agua.
Con pasta
Me encanta acompañar la pasta con todo tipo de salsas caseras o de vegetales salteados. Por ejemplo, mi famosa lasaña boloñesa con espinacas, que está impresionantemente buena. Es de mis platos estrella desde luego. O esta lasaña de espinacas, carne de termera, salmón y piñones. O estos canelones vegetales de pisto, espinacas y atún que están mmmm
Pero no sólo podemos acompañar la pasta de espinacas, si no que podemos hacer nuestra propia pasta fresca casera de color verde, añadiendo unas espinacas ya salteadas a nuestra masa de harina, huevos, aceite de oliva y sal. Como estos fetuccini o nidos de espinacas con guindilla y ajo.
Podemos tomar las espinacas esparragadas, en guisos y estofados, cocidas, en albóndigas y hamburguesas mezcladas con la carne, cremas de verduras, como se os ocurra, seguro que siempre quedan bien :)
Y vosotros ¿cómo usais las espinacas en la cocina?